Escrito por: LIC.FT. CARDENAS VARGAS LUZ DAMARIS
La espondilitis anquilosante es una enfermedad inflamatoria crónica que afecta directamente a las articulaciones vertebrales y la pelvis, en medida que avanza la enfermedad estas tienden a fusionarse provocando dolor y rigidez articular debido a que afecta también los lugares donde se insertan músculos y ligamentos.
Esta enfermedad afecta a 0.6 % de la población mexicana es decir que se tiene registrados 64, 866 casos registrados, teniendo una aparición en edades de los 20 a los 30 y con predominio en hombres (3/1).
La EA se caracteriza por comenzar con dolor en la zona lumbar y puede llegar a ir en ascenso, llegando afectar la zona cervical, y la cintura escapular. Algunos síntomas tempranos que llegan a presentarse pueden ser :
- Dolor crónico y rigidez de la espalda baja, las nalgas y las caderas. Este malestar generalmente se desarrolla lentamente por varias semanas o meses.
- Dolor y rigidez asociados a la EA que empeoran durante períodos de descanso o de inactividad y mejoran con el movimiento y el ejercicio.
- Las personas con EA frecuentemente se despiertan en medio de la noche o temprano en la mañana con dolor de la espalda.
- Sentirse muy rígido en la mañana.
El tratamiento de esta patología suele ser para disminuir dolor y rigidez, además de prevenir deformidades corrigiendo posturas ya que hasta la fecha no hay un tratamiento que pueda quitar por completo este padecimiento por lo cual se ve acompañado de tratamiento médico y fisioterapéutico teniendo como objetivos primordiales los puntos anteriormente mencionados.
El tratamiento fisioterapéutico será implementado de manera que se busque disminuir el dolor con corrientes de analgesia puede ir acompañado de una compresa caliente para ayudar a disminuir la rigidez muscular y manejar ultrasonido en paravertebrales en baja potencia para dar un micro masaje sin llegar a lastimar.
Acompaña de un programa de higiene postural, ya que este es el punto primordial para evitar deformidades y mantener arcos de movilidad. Uno de los objetivos en los que se tienen que dar relevancia es que se le den al paciente ejercicios respiratorios para evitar la rigidez en caja torácica y permitir que la mecánica ventilatoria se lleve de la manera más eficiente, además de dar la recomendación de integrarse a un programa de natación.
Mucho del avance depende del paciente que adopte y modifique las indicaciones que se le den como el cambio de colchón, el posicionamiento al dormir o al estar sentado al realizar sus labores y en dado caso que exista un rigidez presente se debe solicitar ayuda de auxiliares (como calzadores con agarraderas largas y artefactos para ponerse los calcetines le pueden auxiliar si la espalda o las caderas no se flexionan fácilmente. Un terapeuta ocupacional le puede aconsejar sobre artefactos o aparatos especiales de asistencia).